¿Por qué se dificulta terminar una relación amorosa en la que ya no nos sentimos contentos?
Una fuerte razón puede ser porque se generó una codependencia hacia la pareja.
Caemos en desarrollar una codependencia hacia la otra persona, cuando el valor de uno mismo, está puesto en la pareja. Revisa la valoración que tienes de ti, de tu pareja y de tu relación por separado, identifica donde se encuentra tu valor como persona y si no lo tienes puesto en ti debes trabajar con tu autoestima.
Presión Social.
La sociedad en la actualidad ve con buen ojo que las personas estén solteras y se realicen a sí mismos en el ámbito laboral y social antes de casarse, sin embargo, al ver que tus amigos y allegados se casan tu comienzas a crear un sentido de no pertenencia y empiezas a considerar el matrimonio como un hecho que debe llegar pronto a tu vida. No cometas este error, tu cásate con la persona que consideres la ideal para pasar el resto de tu vida y evalúa la opción del matrimonio con serenidad y sin prisas que lo mismo tiene de malo respirar que ser soltera.
El ideal no existe.
¡Todos los hombres son iguales! ¡Todas las mujeres son iguales! Si piensas esto, estas en un completo error y sólo sigues los mismos patrones siempre que atraen al mismo tipo de hombre o mujer. Reinvéntate y ábrete paso a nuevos horizontes, darse cuenta que sigues los mismos patrones; darse cuenta es una tarea muy difícil y muchas veces te das cuenta sólo cuando vas a terapia emocional, te haces un estudio psicológico, lees un libro relacionado o conocer a alguien que te comente acerca del tema.
¿Tú novio o tu papá… tu novia o tu mamá?
Échate un vistazo al pasado y fíjate si tienes algún asunto pendiente con tus padres, puede que éste asunto sin resolver influya de manera muy importante a la elección de tu pareja y en vez de buscar un pareja buscas a tu padre o madre con un gran parecido para resolver ese problema que tanto te acongoja, incluso sin que te des cuenta.
¡Abre los ojos!
Aprende a valorarte, genera conciencia sobre donde tienes tu valor como persona, deja de repetir los mismos patrones y trabaja en tu autoestima. Si tienes una relación tú establece tus propios límites, nadie es indispensable, tú eres una gran persona y vales muchísimo como para tener una relación destructiva.
Mónica Esquinca A.
FB: Mónica Esquinca Psicoterapeuta y Coach de Vida